Escrita en los albores del Siglo de Oro español, y durante el tránsito entre el Medioevo y la modernidad La Celestina nos muestra un mundo de contrastes, desde las más elevadas pasiones hasta los sentimientos más bajos, y donde se entrecruzan personajes nobles y plebeyos. Celestina, vieja alcahueta tejedora de engaños es al tiempo despreciada pero requerida por la sociedad; con sus artes y diligencias concierta encuentros furtivos de amantes como Calisto y Melibea, quienes sin Celestina no hubiesen accedido al placer pero acaso tampoco hubiesen tenido tan fatal desenlace.
