Antes de leer y escribir, hay mucho por hacer: dar a los niños numerosas oportunidades para hablar, construir y expresar su personalidad, escuchar, pensar, jugar, moverse, controlar su cuerpo, ejercitar la praxia global y la praxia fina, sentir confianza en sí mismos, y si, todas estas habilidades aparentemente desvinculadas de la grafomotricidad se convierten en los sólidos cimientos sobre los que se construye la adquisición de la lectoescritura. Estas competencias comunicativas son parte de un proceso gradual que comienza desde el nacimiento mismo y que en la escuela también debe empezar mucho tiempo antes de elegir el método de enseñanza de la lectura y la escritura, si es que nuestra meta es que los niños sean competentes para leer y ser lectores, escribir y producir textos. El libro, basado totalmente en el enfoque por competencias, incluye una guía didáctica dedicada a padres y educadoras, un fichero con sugerencias previas a la realización de cada ejercicio, una clasificación iconográfica de las habilidades ejercitadas, indicaciones de los campos formativos y todas las herramientas necesarias para ir y venir desde el movimiento a la lectoescritura, en experiencias semiestructuradas que integran todas las áreas del desempeño humano.
