Si eres una adolescente con unos kilos de ma´s, te masturbas con sigilo para no despertar a tu hermano pequen~o, vives en Wolverhampton, formas parte de una familia numerosa con una economía precaria, tienes un padre con aspiraciones nunca cumplidas de triunfar en la mu´sica, que abusa de la botella, y una madre depresiva, la vida puede ser un asco. Si para colmo haces el ridi´culo en la televisio´n local leyendo un poema, probablemente ha llegado el momento de tomar una decisio´n dra´stica. Empezando por cambiarte el nombre.
Así es como Johanna Morrigan se convierte en Dolly Wilde y empieza a dedicarse a la cri´tica musical en una revista londinense. Y, entre concierto y concierto, la protagonista y narradora de esta novela de iniciacio´n relata sin pelos en la lengua su empen~o en convertirse en adulta a base de fumar, beber y dejar de masturbarse con artilugios variopintos para pasar al sexo con hombres no menos variopintos.
La autora deja muy claro que esto es una novela y no una autobiografi´a, pero su personaje comparte no pocas experiencias vitales con ella. Despue´s de su explosivo co´ctel de feminismo antidogma´tico y consejos im pagables en Co´mo ser mujer, Caitlin Moran continu´a su rompedora indaga cio´n en la feminidad con esta narracio´n escrita con realismo descarnado y humor procaz. Una voz femenina imprescindible: contundente, díscola y sobre todo muy, muy divertida.
«Adoro a Caitlin Moran» (Lena Dunham).
«Ojala´ alguien me hubiera dado a leer este libro pendenciero y valiente cuando teni´a diecise´is an~os» (Dwight Garner, The New York Times).