Los castillos se llenan de alegría, las campanas suenan por todos los cielos, ¡se ha anunciado la llegada de un par de herederas en el país de los gigantes y el de los enanos! Pero, no contaban con que las cigüeñas encargadas de llevar a las princesitas tendrían algunos problemas para encontrar el lugar exacto de la entrega. En esta fantástica historia de enredos absurdos y graciosos, veremos lo importante que es lidiar con la frustración para encontrar la solución a los problemas. Cigueñas y reyes deberán asumir con honestidad la responsabilidad de sus actos, sin importar que sean grandes éxitos o rotundos fracasos. ¿Cómo le harán los reyes gigantes para alimentar a una recién nacida que ni siquiera pueden distinguir con una lupa? ¿Qué posibilidades tendrán los enanos de cuidar a una heredera que no cabe siquiera en toda una habitación? Esas cigüeñas despistadas deberán hacer algo para corregir su error.
