Daniel Prieto señala en la “introducción” de este libro: “Reconocemos dos tipos de comunicación: la información colectiva y la comunicación intermedia (grupal), cada una de las cuales encierra problemáticas específicas y a menudo irreconciliables. Desde esa perspectiva, distinguimos, ocho elementos que están siempre presentes en todo proceso de comunicación: emisor, código, mensaje, medios y recursos, referente, marco de referencia, perceptor y formación social. Además del análisis de cada uno destacamos lo que realmente los constituye: la relación que establecen según el tipo de proceso de comunicación en que aparecen. Elementos, pues, no válidos en sí sino por su carácter relacional. En este carácter el que permite distinguir entre información colectiva y comunicación intermedia”, y a partir de este concepto nos hace entender los sutiles mecanismos mediante los cuales la sociedad actual somete a los individuos a una debilidad objetiva que terminan por hacer suya sin saber ni cómo ni por dónde. Pero Prieto no se limita a poner al descubierto tales mecanismos sino que propone formas alternativas de comunicación que pueden contribuir, mediante toma de conciencia, a la transformación de la sociedad.
