Cora, hija de esclavos, ha crecido en una plantación en Georgia, un lugar infernal donde se ve sometida a la crueldad de sus amos y marginada por sus iguales. Ya adolescente conoce a Caesar, otro esclavo, quien le propone huir juntos hacia el norte utilizando el «ferrocarril subterráneo». La joven dejará su hogar y emprenderá un arriesgado viaje a lo desconocido. El Ferrocarril Subterráneo era una agrupación abolicionista clandestina que ayudaba a los esclavos a huir a los estados libres del norte y Canadá. Whitehead utiliza este episodio para imaginar una red secreta de túneles que cruzan el país, una vía de esperanza para los oprimidos de otro tiempo.
