Si has elegido ete libro porque tenías ganas de leer algo divertido, te has equivocado. Es verdad que la historia es divertida al principio, cuando los hermanos Baudelaire pasan un tiempo con su loco Tío Monty y sus reptiles, pero no te dejes engañar. Si conoces algo de los niños Baudelaire, sabrás que hasta las aventuras más divertidas acaban por llevarlos por el camino más catastrófico. De hecho, en las páginas que tienes entre las manos, los tres hermanos casi estampan un coche...