La posibilidad de que inteligencias no humanas hayan visitado nuestro planeta, e incluso hayan copulado con los seres humanos primitivos, se encuentra en muchos de los antiguos registros culturales y religiosos de nuestra civilización. Existen registros históricos que revelan, además, que esas inteligencias eran reptiles en su naturaleza o, al menos, han sido representados a lo largo de la historia humana con forma reptiliana. Desde la Serpiente Nahash, en el Jardín del Edén, a Atum, el hombre-serpiente egipcio, o Quetzalcotl, el dios serpiente de los mayas,... Ampliar