Todos hemos sentido alguna vez la frustración de querer decir algo y no poder. Por timidez o por miedo nos quedamos callados. Más tarde, todos los argumentos vienen a nuestra mente y nos reprochamos nuestro silencia. Al mismo tiempo, también hemos vivido situaciones en las que nos preguntamos "¿Por qué dijiste eso?" o "¿Por qué respondí de tan mal modo?". Y sentimos que los demás nos juzgarán por haber reaccionado airadamente. Ambas conductas, la sumisión y la agresividad, coexisten en el individuo. Para lograr un equilibrio entre ellas es necesario practicar la asertividad: aprender a expresarnos en el momento oportuno, fluidamente, sin temor ni ansiedad y con respeto hacia nosotros mismos y hacia los demás. Parece difícil, pero es posible. En este libro se ofrecen herramientas sencillas que ayudan a replantear el modo en que nos relacionamos en diversos ámbitos: la familia, el trabajo, las reuniones sociales... Aplicar la inteligencia asertiva nos conduce a una nueva manera de comunicarnos, de tomar decisiones y de insertarnos en el mundo. Acciones que, sin duda, nos harán sentir cada vez más seguros y satisfechos, un paso adelante en nuestra realización personal.
