La violencia física de la conquista y los primeros intentos de excedentarización fueron tan bruscos, alienantes e insoportables para los indígenas de América que provocaron desde el primer momento respuestas extremas. En este libro se plantea el estudio de las insurgencias, a veces revolucionarias, que tuvieron lugar a ambos lados del Atlántico con sus consecuentes cambios en las estructuras sociales.