Leer El loco es como conversar con un amigo muy querido que nos comprende y nos invita a pensar, a reflexionar, y nos ayuda a enfrentarnos a las grandezas y miserias de nuestra alma para descubrir nuevos horizontes. En El vagabundo, las más de cincuenta parábolas, con un hondo contenido humano, escritas poéticamente, y que son meditaciones sobre el amor, la paz interior, el silencio, la hermandad; nos enseñan que la perfección espiritual es posible si uno se ha decidido a alcanzarla. El loco y El vagabundo son obras que están unidas por su temática y que permanecen vigentes desde su primera edición. Estuvo en lo cierto el crítico Joshep Collomb, cuando en 1918 dijo “Gibran llegó para quedarse”.
