Quien se esconde detrás de las grandes ventanas de fieltro, disfruta de las divertidas rimas, mira por los agujeros y llévate una sorpresa. Estimulando su sentido del tacto mientras se divierten.
Desarrollo del lenguaje: Las rimas sencillas y pegajosas ayudarán a los niños a aprender nuevas palabras y a familiarizarse con los nombres de los animales salvajes.
Motricidad fina: Levantar las solapas y explorar las ventanas ayuda a mejorar la coordinación mano-ojo y las habilidades motrices.
Fomento de la curiosidad: Los agujeritos permiten a los niños anticipar qué animal se esconde detrás de la ventana; creando un ambiente de expectación y emoción.