En las páginas de 'Una patria aparte', los personajes viven una suerte de estado límbico entre esperanza y desesperación; la primera motivada por el deseo de conocer la verdad sobre las desapariciones forzadas, y la segunda por las falsas promesas y el carpetazo que intentan sepultar todo intento. Se trata de una novela que exhibe un paralelismo: por una parte, la búsqueda de desaparecidos durante la guerra sucia Argentina; por el otro, las desapariciones que han ocurrido en México, especialmente la de los 43 normalistas de Ayotzinapa. Pese a tratarse de dos naciones y contextos distintos, sus historias se entrelazan. La trágica ironía de la desaparición que no desaparece del alma de los personajes, los lleva a compartir y a empatizar con la incertidumbre de quienes viven un proceso similar. Los une también la posibilidad de que, en algún momento, un destello permita recuperar el pasado que se les arrebató.